En México, los adultos mayores tienen los derechos humanos que otorgan la Constitución Política y los Instrumentos Internacionales de los cuales el país es parte, y cuentan con todos los mecanismos para salvaguardar y garantizarles una vejez digna.
Algunos los sus derechos son: derecho a no ser discriminadas en razón de su edad; gozar de las oportunidades que faciliten el ejercicio de sus derechos en condiciones de igualdad; recibir el apoyo de las instituciones creadas para su atención en lo relativo al ejercicio y respeto de sus derechos; ser protegidas y defendidas contra toda forma de explotación, maltrato físico o mental; gozar de una vida libre de violencia; recibir la atención y la protección que requieran tanto por parte de la familia como de la sociedad; mantener las relaciones con su familia, en caso de estar separadas de ella, a menos que esa relación afecte la salud y los intereses de las personas adultas mayores; realizar su testamento con toda libertad, sin que para ello intervenga persona alguna; por mencionar algunos de sus derechos fundamentales a los que ninguna autoridad puede negarles el acceso; por lo que la observancia de sus derechos se hará sin distinción alguna.
De acuerdo con información de la Organización de las Naciones Unidas, el número de personas de 60 años o más está aumentando a un ritmo sin precedentes; se prevé que aumente de 740 millones a mil millones para 2020. En la actualidad, dos terceras partes de las personas mayores del mundo viven en países de ingresos bajos y medios, esta proporción aumentará al 80% para 2050.
Las personas mayores no son un grupo homogéneo, y los desafíos que enfrentan en la protección o el disfrute de sus derechos humanos varían enormemente. Mientras que algunos continúan llevando vidas activas como parte de su comunidad, muchos otros enfrentan la falta de vivienda, la falta de atención adecuada o el aislamiento.
La discriminación múltiple aparece como un componente esencial de cualquier análisis, particularmente cuando se considera la discriminación relacionada con la edad si a menudo se ve agravada por otros motivos de discriminación, como el sexo, el estatus socioeconómico, el origen étnico o el estado de salud.
La Comisión de Derechos Humanos del Estado de Aguascalientes lleva a cabo un trabajo permanente de educación y sensibilización a fin de que las personas cuenten con herramientas que garanticen el respeto a los derechos humanos de los adultos mayores.
En el estado de Aguascalientes, cualquier persona de la tercera edad que considere que un servidor público le haya vulnerado un derecho humano, puede presentar su queja en el teléfono de la CDHEA, el 1407870, o presencialmente en República de Perú 502, Fraccionamiento Santa Elena.
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